Por Sergio Quintanilla Cárdenas
En el Centro Histórico de la capital potosina, platiqué en un par de ocasiones con Diego, antes de la entrevista. Después de conocerlo, no podría imaginarlo haciendo otra cosa que arte. La historia de cómo llegó a estudiar artes plásticas, la convicción de su vocación y su pasión por las artes, es un guión de película; precisamente así, como le gusta vivir su vida, como una historia cinematográfica.
Aventura y atreverse, son palabras clave en su iniciación en el arte; pero, creo definen su estilo de vida, donde se arriesga y no cesa en su sueño y empeño, de ser un referente en las artes.
Tiene claro el precio del éxito: trabajo duro y arduo. Así, desmitifica la imagen romántica del artista bohemio, que crea en mágicos tocado por la inspiración de una musa. Al contrario, nos muestra los entretelones reales del oficio de crear. La minuciosidad de los detalles en su obra, son importantes; por ello, elaborar sus propios materiales de trabajo es una premisa fundamental, a partir de la cual, empieza la creación de sus piezas artísticas.
La temática social es uno de los ejes sobre los que gira su obra; generar reflexión y un cambio, su objetivo. En ese compromiso con la colectividad, no podía faltar la docencia, una faceta del artista compartiendo conocimiento.
Diego, es de esas personas que después de un par de charlas, sientes conocerlo desde hace mucho tiempo. Además, de un gran artista, puede ser, un gran amigo.
Aquí, la entrevista.
Hola Diego, ¿cómo estás?
Bien Sergio, que gusto estar aquí.
Generalmente, conocemos solamente la cara pública del artista, que no necesariamente coincide con la persona real. Hay como una construcción social de la imagen de un artista; incluso, una imagen genérica de bohemios tocados por una musa. Te quiero preguntar, ¿quién es Diego Rafael López?, ¿quién es la persona detrás del artista plástico?
Es una pregunta muy difícil de contestar. No me lo vas a creer, pero venía caminando al centro y decía: ¡que no me pregunte eso! (risas). Bueno, hay que contestar. Soy una persona común y corriente, pero creo, que he sabido identificar mis puntos fuertes; por ejemplo, platicaba la otra vez con una amiga y me decía: «¿Cuál es tu súper poder?». Le contesté que mi súper poder es que soy muy persistente, difícilmente me van a ver caído o que no logre mis objetivos.
La verdad, es que soy muy aferrado a lo que quiero y creo que los resultados se han visto. Me acuerdo que hace como diez años, les platicaba a mis amigos muy cercanos que quería dar clases en el Centro de las Artes; en ese entonces, yo estudiaba ingeniería. Parecía como un sueño guajiro; pero, lo logré, desde hace dos años y medio que estoy dando clases ahí. Todo ha sido a raíz de esta perseverancia que te comento. Uno está constantemente luchando por lo que quiere y te enfrentas a situaciones que ni te imaginas, pero no estás sólo en el camino, tienes a muchos colegas que te echan la mano, que están ahí a pie de cañón contigo, que te apoyan; si te caes, te levantan o te ayudan a que el camino sea más sencillo.
Entonces, realmente no hay ningún secreto, hay que dejar atrás esa imagen mítica del artista. Incluso, siempre les he comentado a mis alumnos que se quiten ese estigma del artista bohemio, no los va a llevar a ningún lado. Esta visión, es compartida por otros artistas, como José Clemente Orozco, uno de los tres grandes muralistas, pues él no era tan fiestero. Entonces, no hay secreto, soy una persona común y corriente que está luchando por sus sueños, así me definiría.
¿Qué es lo qué hace la diferencia entre una persona que tiene un trabajo tradicional o distinto al de un artista?, ¿es la manera de ver el mundo, la manera de concebirlo, la propuesta de su trabajo?
Mira, Sergio, a mí me gustó mucho lo que me dijo un buen amigo que conocí en la zona industrial. Estuve trabajando en la zona industrial un tiempo y, él y yo, nos considerábamos como los raros y decíamos: “Somos los virus del sistema”. Definitivamente, creo que va por ahí. Un artista plástico o un artista en general, es un virus en el sistema. Estamos fuera de los convencionalismos y, me refiero a esto porque, por ejemplo, en el periódico no vas a encontrar un empleo para un poeta o para un pintor, no lo hay, no existe, ni siquiera en internet. Tu trabajo va haciendo que te reconozcan, a veces, ni siquiera el título académico interesa, y eso, es también bien curioso porque normalmente cuando vas a pedir trabajo, lo primero que piden es el título. En las artes no, lo que nos define es la calidad de nuestro trabajo, nuestro empeño y, que tanto, queramos salir adelante en esto que nos gusta; demostrar que de verdad se ha convertido en nuestra vocación, no que es solamente un gusto. Eso es una diferencia abismal entre lo que conocemos de una profesión normal o común, con las artes.
Comentabas que antes de estar de lleno en las artes estuviste trabajando en la zona industrial, ¿cómo fue ese paso, salto o proceso entre tener un trabajo formal y entrar de lleno a las artes?
Imagínate, que tenía todo lo que un chavo a los 23 años podía aspirar. Tenía un trabajo seguro, me pagaban muy bien, tenía todas mis prestaciones. Sin ningún problema, pude haberme quedado ahí y continuar mucho tiempo más; pero, creo que, hay una voz interna que no te lo permite, una voz interna que estés haciendo lo que estés haciendo se está manifestando y está latente dentro de nosotros. Esa vocecita fue la que no me dejó continuar ahí. Deja te cuento que, en esa época de mi vida, a veces, tenía pesadillas porque no podía dedicarme a esto de las artes, me sentía atrapado en esa cotidianeidad. Entonces, un día, decidí: ¡hasta aquí, hasta aquí le paro! Sentí que estaba tomando responsabilidades, cada vez más importantes en la zona industrial y, me dije, si continuo con esto, me voy a comprometer más y no quiero. Esta vocación o esta voz interior me decía que no, que yo tenía que seguir en esto de las artes.
Fue un cambio muy importante en mi vida, porque fue transitar a lo largo de un camino que yo no conocía. A lo mejor, muchos piensan que los que estamos en esto de las artes tenemos conocidos o algo así; generalmente sí es así, pero no en mi caso, yo no conocía nada ni a nadie del medio, ni siquiera conocía la existencia de la escuela de artes, fue mi papá quien me lo dijo. En conclusión, te diré que todo se trató de aventurarse, atreverse; no me arrepiento, aquí estamos muy felices y todavía con muchas ganas de seguir adelante.
Es muy interesante lo que me cuentas. Quiero suponer entonces, que tu acercamiento al mundo artístico no fue desde muy niño, ¿cómo surgió esa relación con el arte o lo artístico en tu infancia o adolescencia? ¿Aún no descubrías tu vocación en esas etapas de tu vida?
Desde niño, creo que no. Me acuerdo muy bien, que de niño decía que quería ser doctor; pero, si había ese gusto por elaborar cosas con las manos. Mi mamá cuenta mucho que, las maestras del kínder, le decían que hacía monitos de plastilina muy bien hechos; sin embargo, yo no recuerdo haber sentido de niño esa vocación, ni ese interés consciente, era más como un gusto simplemente. Muchos de mis compañeros, desde los 15 a 17 años, iban a bellas artes, cosas así, yo realmente no tuve ese acercamiento. En la secundaria si me dieron clase, por ejemplo, de dibujo artístico y caricatura, una vez a la semana; pero fuera de eso, fue poco lo que yo aprendí de arte durante esta etapa de educación formal.
Recuerdo también, que los sábados veía unos documentales muy buenos, por cierto, que hablaban de pintores. Sin duda, que ver como esos artistas habían hecho sus obras, fue un estímulo muy fuerte. A través de esos documentales se fortaleció esa idea que tenía, de dedicarme a las artes; pero realmente, nunca hubo un acercamiento formal, fue poco a poco. Tiempo después, me entero de la carrera de artes e intento ingresar, por primera vez, pero por cuestiones de mi familia no me dejaron. Fue hasta que terminé ingeniería, que entré. También, quiero aclarar, que no es que la ingeniería me desagrade, la verdad es que me gusta mucho; entonces, no siempre están peleadas las cosas como normalmente se cree, me siento muy identificado tanto con la ingeniería como con las artes plásticas.
Entonces, ¿en qué momento descubres de manera incuestionable tu vocación?, ¿en qué momento dice: ¡Diego se quiere dedicar ser artista o se quiere dedicar a las artes plásticas!?, ¿hubo algún momento concreto o fue un proceso?
Fíjate, que un momento como tal, no; todo se ha ido dando. Lo que sí es cierto, es que, desde adolescente, cuando hacía dibujos era un disfrute muy grande; entonces, ese disfrute era lo que me iba llevando a interesarme más en el arte hasta llevarlo a un nivel profesional y hacerlo mi modo de vida. Fue un proceso, realmente no hubo en mi vida un evento fundamental, todo se fue dando; pero sí, te puedo asegurar, que cada vez que conozco más de esto, me ayuda a estar totalmente seguro de que no quiero cambiar. Al contrario, me confirma que no me veo en una oficina, que no me veo en la zona industrial, que no me veo haciendo otra cosa que no sean las artes plásticas; así que, aunque se me complicara el tema del dinero, no me quiero mover, quiero seguir en las artes.
Evidentemente, el conocimiento y el talento forman parte de un artista; pero, ¿y la pasión? La pasión por lo que se hace, la pasión por el oficio, por el estilo de vida, por la libertad de hacer lo que te gusta. Además, está la posibilidad que el arte te proporciona para proponer desde tu forma de entender y concebir las cosas, otro mundo distinto, diferente; no sé si mejor o peor, pero sí, más personal, ¿qué opinas al respecto?
Estoy de acuerdo, sobre todo con esta última parte de lo que comentas. Como artista plástico, creo yo, tenemos esa posibilidad, que no es una obligación, de dar una visión nueva a partir de nosotros, de la realidad y, creo, que ese es un punto o característica fundamental con la que todos los artistas deberíamos de tratar de nutrir en nuestro trabajo, predominantemente.
Lo que comentas de la pasión, también es un ingrediente importante, pero considero que más que la pasión y que la inspiración, creo en el trabajo duro, arduo. Como dicen por ahí: 99 % transpiración 1% inspiración. Creo firmemente en eso. Si no estás trabajando, si no estás acudiendo a exposiciones, platicando con tus colegas, no llegas muy lejos
Finalmente, lo logras y te dedicas al arte, ¿cuáles son actualmente las técnicas que manejas y la propuesta que tratas de ofrecer con tu trabajo, con tu obra?
Me gustan lo que se denomina como artes tradicionales; o sea, la pintura con medios tradicionales, el grabado, el dibujo; sobre todo ahorita, que me he desempeñado en esas tres disciplinas, que son principalmente, el medio a través del cual me comunico.
Por otra parte, hay medios muy actuales que me gustan, porque me parecen una especie de simbiosis, por decirlo de alguna manera. Lo comento, porque empleo herramientas tan viejas, tan antiguas, como lo es el temple al huevo, junto a otras muy actuales, como la fotografía, la ilustración digital; por ejemplo, muchos de mis bocetos, primero los ilustro de manera digital porque al final agiliza mis procesos antes que llevarlos al lienzo o a la plancha o al papel para dibujarlos.
Te comento, también, que mi crecimiento, mi renacimiento desde un punto de vista técnico, de métodos y de materiales sucede a través de los grandes maestros del barroco y el romanticismo; principalmente Rembrandt. Ellos, son las influencias más fuertes que tengo.
Finalmente, quiero agregar, que casi todo mi cuerpo de obra se desenvuelve en temáticas sociales. Me interesa dar mi punto de vista respecto de algunos acontecimientos sociales. Esto, va a ser más evidente en la última serie en la que estoy trabajando. Espero que nos puedan acompañar Sergio, ya te avisaré cuando estemos listos, pero la verdad, las temáticas son sociales.
Tenía la idea de que todos los artistas compraban en la tienda sus materiales y, a partir de ahí construían su obra. Sin embargo, en otra ocasión, me comentaste que preparabas tus propias pinturas, lo cual, me parece muy interesante. A través de investigaciones que has realizado, rescatas los métodos tradicionales, artesanales, para elaborar tus propios materiales. ¿por qué te parece tan importante o tan especial esta parte de elaborar tus propios materiales, de conocer y experimentar con la consistencia y los efectos en el tiempo que pueden reflejar esos materiales?
Esta pregunta me parece muy interesante. Más allá de una postura romántica, como en el caso de los hípsters que se ponían a trabajar en su máquina de escribir y, no lo hacían en computadora porque decían que tal autor escribía en máquina de escribir. No se trata de eso; aunque sí, pudiera existir esa postura, como muy romanticona.
En mi caso, hay otras razones más importantes como el nivel de conservación de las piezas. Con esto, tampoco quiero decir que el material que se vende en las tiendas sea malo, simplemente tiene ciertas características diferentes a las que adquiere si uno las prepara de manera artesanal. Como bien lo has dicho, es una preparación artesanal, no hay otro camino. ¿Cuál es la ventaja de esto? Más allá de posturas y matices ideológicos, el artista siempre va a echar mano de algunos materiales dependiendo de sus circunstancias de vida, de su entorno; entonces hay que aprender a elaborarlos. Por ejemplo, si yo estuviera en la cárcel y tuviera la necesidad de expresarme, no me voy a esperar a tener mis pincelitos, mis solventes; usaré lo que tenga a la mano y, a veces, esas son las obras que pasan a la posteridad. Me gusta rescatar estos procedimientos de la coloración artesanal de la pintura, por ejemplo. También, pasa con los barnices para grabado y algunas tintas que también se pueden elaborar artesanalmente.
Entonces, específicamente en la pintura, la razón es precisamente lo que te comentaba, la conservación. Además, porque conociendo los materiales tu puedes manejarlos de la manera que quieras y, no depender de como puedan salir del tubo, que ya tiene cierta consistencia y otros ingredientes que, no necesariamente, son buenos para la conservación de la obra. Sin embargo, hay quien considera que esta bien utilizarlas y adelante. Por el contrario, cuando uno hace sus pinturas de manera tradicional artesanal, sabes que únicamente estas utilizando el medio y el pigmento, nada más, no hay otra cosa. A mí me gusta hacer mis pinturas y mis medios, que son aceites que preparo también de manera natural; pero, más allá de una postura romántica, la razón de todo esto, es la conservación y el gusto de elaborarlas.
En alguna entrevista tuya que leí, referías que buscabas en tu obra el realismo físico, ¿podrías contarnos en que consiste y porque te interesa esa corriente o técnica? ¿qué es lo que buscas a través de ella?
A medida que fui adquiriendo nuevo conocimiento, me di cuenta que lo que, en ese entonces, yo le llamaba “el realismo físico”, término que yo lo acuñé; ya existía, pero era denominado pintura naturalista. Es importante decir, que este tipo de pintura, tiene un punto neurálgico con Rembrandt.
Ahora, ¿de dónde surge la pintura naturalista?, pues precisamente de representar con más naturalidad la realidad. Por ejemplo, si queremos pintar un paisaje con mucha distancia, montañas muy lejanas del espectador, lo vamos a hacer con pintura más delgadita y a medida que nos acercamos al espectador o que la obra se acerca al espectador, intervienen algunos recursos técnicos como pueden ser los impastos, las cargas y los tipos de aceites para es representar lo que vemos, no tanto que se parezca, sino que como dije, se represente. Por ejemplo, un rostro humano es una serie de relieves; entonces, lo que busca la pintura naturalista es representar esos relieves más que se parezcan. Obviamente, tiene que haber cierto parecido, pero lo que se busca es que ese relieve, que como tal es la morfología del ser humano, sea representada en la pintura. En la fotografía sí, es el parecido; en la pintura no, necesariamente. La pintura tiene muchas otras búsquedas a partir de todo este contexto que te comento del desarrollo de la pintura naturalista que tiene siglos de existir, por allá, a finales del medievo.
Básicamente de esto trata el realismo físico o, dicho de otra manera, la pintura naturalista
Otra de las cuestiones que platicabas hace un momento, tiene que ver con el hecho de que en tus obras siempre buscas un contenido social, esto me parece importante. ¿Cuál es tu búsqueda a nivel social?, ¿qué es lo que buscas generar, representar, confrontar, a través de tu pintura?
Lo que trato de generar siempre con mi obra, es una reflexión. Busco que el público que vaya al museo, tenga además de un disfrute estético muy válido, una reflexión sobre su contexto a través de la imagen. Que se cuestionen que está pasando con nuestro entorno, que se cuestione si podemos modificar algo para nuestro bien o si lo que estamos haciendo, está mal. Justamente en las imágenes de las piezas que aparecerán en esta entrevista, toco un tema que tiene que ver con la ecología, se trata de fotomontajes, collages, en los que tomé partes de otras pinturas que me funcionaron y, las recontextualizo a nuestra realidad, para que, como he dicho, exista espacio para una reflexión. En el caso de estas piezas, la reflexión gira respecto del entorno, el medio ambiente; pero, definitivamente los temas pueden ser muy bastos, distintos, pero para mí, la finalidad es la misma: generar una reflexión a nivel social, y con ello, tratar que exista un cambio positivo en la sociedad. Creo que el artista sí puede ser un agente de cambio, influir de una manera más amistosa en el pensamiento de otras personas y tratar de lograr ese cambio.
Sí, un cambio, diríamos, más reflexivo o más consciente. No, un cambio por el mero cambio, sino un cambio que surge a través del análisis, de la reflexión y a través de cierta consciencia individual, hasta ampliarse hacia lo colectivo. Abordando otro tema, ¿la escultura es un lenguaje distinto a la pintura, al dibujo o al grabado? Cuéntanos, ¿en esta materia cuáles han sido tus obras o no tienes aún obra escultórica?
Fíjate que la escultura me gusta muchísimo. Sin embargo, siempre comento que, por cuestiones de espacio, ahorita no tengo un lugar para desarrollar la escultura; pero sin duda alguna, la voy a hacer, en un futuro no muy lejano. Definitivamente, sí es un interés fuerte que tengo, incluso mi papá me decía hace algunos años, que él pensaba que yo iba a ser más escultor que pintor.
También ha influido que la pintura, la gráfica y el dibujo, me han reportado muy buenos ingresos con relativa facilidad; en ese sentido, la escultura no es tan sencilla de vender.
En cuanto a lo que comentas respecto a la diferencia entre la escultura y las otras disciplinas de las artes plásticas, me gusta muchísimo comentar que, creo que sí existe una relación entre la pintura y la escultura. Más bien, tienen todo que ver y, más, por eso que te digo del realismo físico o del naturalismo: la pintura ha buscado representar esos relieves que nos acercan a la escultura. En ese sentido, son disciplinas que se nutren, incluso en mis clases de dibujo y en las de pintura, les digo: imagínense que están modelando, pero ya no es plastilina; en el caso de la pintura, es pasta de pintura al óleo y, en el caso del dibujo, es la mancha la que están modelando. Si uno se pone más atento, es receptivo y sensible a como se trabajan los materiales, se puede hacer este cruce y pensar que el dibujo, incluso el grabado, son como una escultura y viceversa. Entonces, las disciplinas de las artes plásticas no están divorciadas, sino al contrario, tienen todo que ver una con la otra.
Cada vez se ve más escultura en espacios públicos, lo cual posibilita que ésta tenga una función social, ¿cómo ves esta función o posibilidad social de la escultura, como un acercamiento público del arte a las masas?
Creo que uno de los aspectos más positivos de que las esculturas se muestren en las calles, consiste en que las personas que están más alejadas de este círculo artístico se pueden cuestionar, ¿esto qué es?, ¿cómo se hace?, ¿quién lo hizo? De alguna manera, esto también permite que a las personas se les despierte el interés y se acerquen a indagar más, a conocer al artista de la obra; incluso, a entrar a estudiar artes plásticas. Entonces, yo veo que ésta bien, siempre y cuando no se genere como esta contaminación visual porque también estamos sobrados en eso.
Además, creo, que la gente recibe muy bien la escultura en espacios públicos. Una característica especial de esta disciplina, consiste en que permite la interacción directa con el objeto artístico, situación que no ocurre mucho, por ejemplo, en la pintura, el grabado o el dibujo. En la escultura sí, en la escultura puedes tocar; al respecto, me gustó mucho lo que comentaban en una conferencia a la que asistí, decían que la escultura es la más cachonda de las artes plásticas, precisamente por esto, porque son volúmenes y se permite tocar.
El grabado, en mi opinión, es una disciplina que no ha sido lo suficientemente difundida o explotada; sin embargo, ha alcanzado una gran proyección con el maestro Francisco Toledo. Como catedrático de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí (UASLP), en la que impartes esa materia, ¿qué nos puedes decir al respecto? y ¿qué nos puedes contar, además, de tu gusto por el grabado?
Primero que nada, extender una invitación a que vayan al taller de grabado del Departamento de Arte y Cultura de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí (UASLP). Me pueden contactar y nos ponemos de acuerdo para que tomen una clase muestra; inscríbanse, para que conozcan que es el grabado. Es una invitación abierta a todos nuestros lectores de la revista.
Ahora bien, te comento que México tiene una gran tradición en grabado. Tenemos a uno de los grandes de todos los tiempos que fue José Guadalupe Posada; su obra es muy importante y reconocida a nivel internacional. La semana pasada fui a su museo en el estado de Aguascalientes y la señorita que estaba como guía, nos platicaba que los japoneses, que han sido uno de los países con más potencia en el grabado, estaban interesados en adquirir alguna obra del maestro Posada. Entonces, la tradición del grabado en México viene con mucha fuerza desde ahí; aunque como sabemos la tradición de esta disciplina existe en México desde antes, pero me refiero a la etapa moderna de México, en la cual, contamos con este personaje tan importante y con el Taller de Gráfica Popular en la Ciudad de México, formado por excelentes artistas de primer nivel. Más recientemente, tenemos al maestro Toledo.
El grabado es una disciplina muy rica en recursos. Los procedimientos, a veces, son tan rústicos que no requieren de un gran equipo. Puedes hacer grabado sobre cualquier superficie que sea susceptible de rallar, entintar, pasar por el tórculo y ya tienes una estampa. Hay procesos muy mecánicos en los que obtienes una imagen con una calidad idéntica a una impresión digital, eso, a mí me ha sorprendido mucho del grabado.
Retomando un poco lo que veníamos hablando, sobre cómo estas cuatro disciplinas del arte se conectan, pues el grabado en una de sus vertientes que es el monotipo, tiene mucho de pintura y, no se diga de dibujo. Además, lo que veníamos comentando antes de entrar al café, si no sabes dibujo, por más que conozcas todos los procedimientos, métodos y materiales del grabado, no vas a hacer nada. Entonces, el grabado es muy rico en técnicas, materiales; en resultados, se puede mezclar, se puede expandir, entonces, es muy interesante.
En San Luis Potosí, creo, falta que nos pongamos la pila para que se conozca más el grabado y, además, para que haga más grabado. Nos falta mucho en comparación con otros estados colindantes de San Luis, que no sólo tienen una tradición más arraigada, sino también, se han puesto en marcha para trabajarlo. Ante esa carencia, reitero la invitación a los lectores de la revista para que se acerquen, no sólo al espacio que dirijo y en cual estoy trabajando: Taller de Gráfica Contemporánea de la Azotea del Departamento de Arte y Cultura de la UASLP; sino también, a otros espacios como Bellas Artes y el Centro de las Artes. Acérquense a estas manifestaciones artísticas, son muy interesantes y seguramente van encontrar eco en esta disciplina para poderse expresar.
En el Centro de las Artes impartes la materia de dibujo, ¿qué nos cuentas al respecto de esta otra disciplina, que como bien nos explicabas, todas son complementarias y son vías o caminos de expresión?
Definitivamente, el dibujo es la base de las otras disciplinas: pintura, escultura y el grabado. En el taller que imparto doy principios de dibujo. Es dibujo de iniciación, bases firmes para que después puedan llevarlo a otro nivel. Te comento: para ser un buen dibujante, no es necesario que hagas figuración, ni tienes que ser realista para saber dibujar; un buen dibujante, es también, alguien que hace abstracciones, que maneja la línea, el plano, la mancha y, todos estos recursos se pueden lograr desde el dibujo. Entonces, el dibujo es fundamental, es base, así seas escultor, grabador o lo que tú quieras.
Aprovechando, invito a los lectores de esta revista, para que se den una vuelta a este Taller de dibujo. Espero que en septiembre podamos regresar a clases porque la pandemia nos detuvo completamente.
Tu labor como docente se ha ampliado, has formado una nueva escuela privada de artes, ¿Qué cursos y actividades desarrollas?
Tengo un espacio que se encuentra en el centro de la ciudad. Estamos ubicados en la calle de Damián Carmona #945; están los lectores de la revista 13 de abril, cordialmente invitados a visitarnos y a inscribirse. Aún no tiene nombre este espacio, literalmente lo improvisamos entre unos colegas y yo: Areli Sierra y Mauricio Meza. También, colabora con nosotros Yahir Pérez, autor de “Koatl el defensor”, un cómic potosino, síganlo también, en sus redes sociales.
En este espacio impartimos algunos talleres en verano. Además, un par de talleres anuales de iniciación al dibujo e iniciación a la pintura. En el de pintura, vemos todos estos conceptos que hemos hablado en la entrevista: La pintura naturalista; elaboración de nuestros propios materiales de trabajo (pinturas); impastos; veladuras; temple al huevo y como utilizarlo. La verdad, es que el temario es extenso. En el caso del taller de dibujo, también es un temario extenso que tiene relación con esto que platicamos. Mis colegas y yo, estamos muy bien preparados, dominamos el tema. Ojalá que nuestros lectores se puedan dar una vuelta al espacio y, si quieren aprender artes plásticas, se inscriban.
¿Cuáles son tus aspiraciones y proyectos a futuro?
Fíjate que tengo muchísimos proyectos que me gustaría realizar. Te voy a comentar los más importantes. En ese sentido, sí soy muy ambicioso.
Uno de ellos, es que a través de mí trabajo y el de mis colegas, San Luis Potosí se convierta en un referente cultural de México, ese es un sueño, una meta, que me gustaría alcanzar. Quiero aclarar, que no me refiero sólo a los colegas con los que yo colaboro más de cerca, sino a toda la comunidad artística y también, en sinergia con instituciones.
También, me gustaría ver más espacios independientes. Afortunadamente y lo digo con gusto, han aflorado muchísimo, sobre todo en el Barrio de San Miguelito. Alrededor de la iglesia, se pueden contar al menos 5 espacios independientes, también dense una vuelta, conózcanlos.
Por otra parte, me gustaría que hubiese museos de relevancia nacional en el estado; un buen museo de pintura; un buen museo de grabado y otro museo de escultura, ya tenemos el museo Federico Silva que es de escultura contemporánea, pero creo, que aún falta mucho que hacer en materia de cultura. La cultura es de todos, todos podemos echar mano de ella y, siento que se ha dejado de lado.
Finalmente, me gustaría que mi obra se vuelva más relevante, no solo a nivel local y nacional, sino internacional y poderme convertir en un referente, en una autoridad, dentro de esto que es el arte, para así, poder lograr estos objetivos que te comento.
En resumen, sería eso, tener esa relevancia y lograr que San Luis Potosí se convierta en este estado referente a nivel cultural, en México.
Aún existen muchas ideas negativas o prejuicios en cuanto a ser artista. Quizás muchas personas consideran a los artistas como personas que nacen con unas características muy especiales, que viven en otro mundo, a veces, fuera del canon de normalidad. También, muchas veces, se les dice a las personas que se quieren dedicar al arte, que económicamente no van a poder vivir de eso, que están condenados a vivir en la pobreza. En ese sentido, te pediría que como artista mandes un mensaje o reflexión para aquellos que quieran dedicarse al arte, no se rindan.
Primero, que se quiten de prejuicios. En segundo lugar y, todavía más importante, que se atrevan, que vivan su vida como si fuera una película. Me gusta pensar, reflexionar sobre esto porque, a veces, nuestra vida es muy monótona. Hay que atreverse y arriesgarse por sus sueños, por sus metas. Desde luego, que nada está garantizado, nada está asegurado, pero debemos luchar por lo que queremos. Entonces, atrévanse, busquen lo que les gusta y, seguramente encontraran personas en el camino que los van a apoyar. El camino sí es difícil, a veces, de mucha soledad por el mismo contexto de las artes plásticas.
Es verdad que muchas veces, las personas, no entienden lo que es estar en esto; porque, bien dijiste al principio de la pregunta, estamos como en otro mundo y, a veces, uno no embona en este. Eso, es lo complejo del asunto. Sin embargo, hay que atreverse, arriesgarse, no tenerle miedo al resultado; si uno trabaja arduamente en esto, los resultados se van ir dando.
Por otro lado, que se acerquen a todos los museos que existen en San Luis Potosí y si pueden salir, ver otros museos, adelante.
Las redes sociales, particularmente a los artistas, nos han beneficiado mucho porque nuestro trabajo puede llegar a cualquier rincón del mundo. Las redes nos han vinculado mucho a otras personas, esto lo digo también, por las personas que viven en el estado de San Luis Potosí. Estas personas, pueden acercarse con nosotros, a lo mejor, mandándonos un mensaje: oye, me gustaría entrevistarte porque mi hijo o hija, quiere estudiar artes plásticas y quiero llevarlo a tu taller, a tu espacio, que más o menos nos digas de que va esto.
Entonces, ahorita hay muchísimas posibilidades, difícilmente te mueres de hambre actualmente, precisamente por esto de las redes. Además, por ejemplo, el grabado particularmente te da esta posibilidad de vender obra original firmada por el artista y, que se puede distribuir a cualquier parte del mundo. Entonces es cuestión de atreverse y no esperar que las cosas caigan del cielo.
Te gradezco mucho la entrevista Diego, muchísimas gracias, por compartirnos tu experiencia, tu visión de la vida, del arte.
Breve muestra de la obra de Diego Rafael López Castillo
Diego Rafael López Castillo
___________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________
Originario de San Luis Potosí. Ingeniero mecánico por la Universidad Autónoma de San Luis Potosí (UASLP). Egresado de la Escuela Estatal de Artes Plásticas de San Luis Potosí. Ha tomado talleres con José Ángel Robles, Sergio Ricaño, Paulina Jaimes y en TTamayo, entre otros. Ha participado en 10 exposiciones colectivas e impartido talleres en diversos espacios culturales. Actualmente, es docente de las materias de matemáticas y física en el Instituto Telpochcalli Calmecac. Imparte dibujo como forma de expresión en el Centro de las Artes del Estado (CEARTSLP) y tiene a su cargo el taller de gráfica contemporánea “La azotea” del Departamento de Arte y Cultura de la UASLP, en el cual imparte la materia de grabado.
Ha colaborado en la realización de varios murales en la ciudad, como el que se encuentra fuera del auditorio Rafael Turrubiartes en la SNTE sección 52; el del frontispicio de la Universidad Pedagógica Nacional, unidad 241 y participó en la intervención del panóptico del CEARTSLP.
Correo electrónico: diegorafaellopezcastillo@gmail.com
Instagram: diegoraphaellopez
Facebook: Diego Rafael
.